Llenamos la bañera con agua muy caliente. Nos metemos en ese agua y ponemos una bola efervescente de chocolate, que se vaya deshaciendo poco a poco. El jabón, de chocolate, y nos enjabonamos todo el cuerpo. Nos relajamos un rato dentro de ese afrodisiaco conjunto de chocolates.
Y a disfrutar de las propiedades del chocolate y de su olor tan dulce.
Dicen que el chocolate
es el sustitutivo del sexo?
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