OPERACION

Vaya día de nervios.

Ya ha costado dormir esta noche, el viaje a sido larguísimo, la espera fatal, ahí me he derrumbado, ya no podía mas. La hemos dejado super contenta, no sabía nada, la pobre. A las once a empezado a dormirse y hasta la una y media no sabíamos nada, una intensa espera, que dura. Por fin nos llaman y la vamos a ver, me quería morir, estaba en el suelo estirada, congelada, con la lengua fuera y muy rígida, se iba despertando poco a poco, y cada vez mas asustada, lloraba. Al fin nos la hemos llevado a casa, calentita.
En casa no para quieta, no quiere tumbarse, es como si tuviera un trauma del despertar anterior, se duerme de pie, a veces se cae y por eso se pone a caminar, se inventa un recorrido por la casa que consiste del comedor, da la vuelta a la mesa y se va para la habitación y vuelve. Se pasa toda la tarde así, cuando la veo cansada le obligo a tumbarse en su cama para que descanse, y si, lo hace, pero se despierta sobresaltada y otra vez a caminar. Me pongo muy nerviosa porque quiero que descanse, no es normal que después de una operación de casi tres horas, se ponga hacer una maraton.
A hecho algún pipí, pero ni come ni bebe.
Vaya noche me espera, supongo que sera larga, pero bueno, lo importante es que a salido de esta, ahora a recuperarse poco a poco.

Esta imagen cuesta de ver, si eres sensible, evita mirarla.
Aquí esta la herida recién cosida, con bastante puntos y dos grapas.